El organigrama de la Biblioteca Universitaria: ¿por qué lo hacemos tan mal?
En general, el organigrama de las bibliotecas universitarias españolas públicas es muy parecido: organización jerárquica y relación de puestos de trabajo en los que se recogen con cierto nivel de detalle aquello que debes hacer, a modo de compartimentos estanco. Todo lo demás está vetado. Lo que se define en el puesto de trabajo son las competencias del mismo, pero en absoluto se tienen en cuenta las habilidades, intereses o pasiones del que realiza ese trabajo.
La reciente visita de Sonja Haerkoenen, biblitotecaria de la Universidad de Cardiff, en Gales y el relato de la asignación de sus tareas en esa biblioteca, me han llevado al título de este post: ¿en este sentido, por qué lo hacemos tan mal por aquí?
Sonja Haerkoenen ha estado recientemente en Sevilla. Políglota como pocas, ha venido para pasar unos dias de vacaciones y de paso estudiar (intensivamente) español, o mejor dicho, perfeccionarlo, aunque se trata tan solo de uno de los cuatro idiomas que habla.
La reciente visita de Sonja Haerkoenen, biblitotecaria de la Universidad de Cardiff, en Gales y el relato de la asignación de sus tareas en esa biblioteca, me han llevado al título de este post: ¿en este sentido, por qué lo hacemos tan mal por aquí?
Sonja Haerkoenen ha estado recientemente en Sevilla. Políglota como pocas, ha venido para pasar unos dias de vacaciones y de paso estudiar (intensivamente) español, o mejor dicho, perfeccionarlo, aunque se trata tan solo de uno de los cuatro idiomas que habla.
Conocí a Sonja hace mas de un año cuando mostró interés por el artículo que escribí con unos compañeros sobre nuestro programa de Referencia virtual LibraryH3lp. Sonja nos cuenta el desarrollo de su proyecto de Referencia Virtual en este video.
Además de la gestión de este proyecto, su planificación, puesta en marcha y seguimiento de su desarrollo, Sonja me habló del resto de sus responsabilidades en la biblioteca de la Universidad de Cardiff.
Como tarea prioritaria, ella es responsable de la sección de adquisiciones y formación en ALFIN de la biblioteca de Psicología de su Universidad. No es responsable de esta biblioteca sino de una sección dentro de ella y los méritos que le reconocieron para este puesto fue su conocimiento del área temática al haber estado trabajando en la biblioteca de Psicologia de la Universidad de Manchester. Además, y gracias a sus conocimientos de idiomas, es tambien la encargada de la selección y adquisición bibliográfica y la formación, en otra biblioteca, en la Escuela de Estudios Europeos. Pero la cosa no queda ahí. Por la información que di al comienzo de este artículo, Sonja es la responsable de una serie de proyectos en los Servicios centrales de la Biblioteca, más concretamente en los Servicios de Información (INSRV). Desde hace años está empeñada en la creación de un servicio de Referencia virtual en la biblioteca. Por esta razón cuando descubrió LibraryH3lp y sobre todo tras su implementación en la Universidad de Sevilla, el equipo directivo de la biblioteca le encargó el proyecto. Ella es la que lo lidera con todo lo que esto significa (planificar, creación de equipos, asignar tareas para todos los bibliotecarios de los centros, establecer políticas, evaluación, informes). Ha llevado tan bien la gestión del proyecto que le han asignado otro que no tiene nada que ver con el anterior, localizar un nuevo programa y gestionar el cambio del que utilizan actualmente para que los alumnos paguen sus multas con la biblioteca, a través del carnet de préstamo.
Podéis ver un resumen de sus responsabilidades en este enlace.
Sonja llegó a ser bibliotecaria por aptitudes para la comunicación, la innovación y la gestión y porque le encantaban los libros:
Las tareas que Sonja tiene encomendadas obedecen a una valoración de sus aptitudes, actitudes, habilidades, intereses, pasiones. Es bibliotecaria temática porque conoce esas materias, tenía experiencia y aptitudes y no exclusivamente porque había un hueco en esas bibliotecas. Lidera el proyecto de Servicio de Referencia Virtual porque era su pasión, estaba informada y actualizaba sus conocimientos mirando lo que se estaba haciendo en cualquier parte del mundo. Esas fueron las razones por las que se le encarga su puesta en marcha, aunque no fuera personal de los Servicios centrales, aunque fuera una bibliotecaria temática de área, aunque no fuera jefe de nada. Era la persona más experta en ese servicio y era su pasión.
Y como además demuestra que es capaz de gestionar un proyecto, aunque no aparezca ese cometido dentro de las "competencias" de su puesto de trabajo, le encargan otro y de índole diferente.
Si traducimos sus competencias a nuestro entorno, resulta que es bibliotecaria especializada en dos áreas temáticas (bibliotecas) diferentes, lidera un proyecto que debería ser responsabilidad del Servicio de Apoyo a la Docencia de los Servicios Centrales, y además lidera otro proyecto que estaría incluido entre las competencias del Jefe del Servicio de Préstamo.
Esto me lleva a la reflexión inicial, ¿qué se tiene en cuenta en las bibliotecas universitarias españolas, a la hora de decidir quien hace qué, cual es su cometido y sus responsabilidades?. Únicamente se observan las competencias que aparecen ligadas a su puesto de trabajo pero no las competencias o habilidades que se tienen y se pueden demostrar. Estamos atados a nuestro puesto de trabajo. Tan solo podemos aspirar a hacer aquello que aparece reflejado en él. No se tienen en cuenta ni las aptitudes, ni la experiencia, ni los méritos, ni las pasiones. Y además se castiga severamente (o sutilmente) si alguien saca los pies del plato, si alguien sube la cabeza por encima de su inmediato superior.
En el organigrama de las bibliotecas universitarias españolas, nadie se puede mover del sitio asignado (al que concursó en la mayoría de los casos) so pena de no salir en la foto.
Cuando uno se encuentra con casos como el de Sonja, es consciente de lo mal que lo estamos haciendo por estos lares. Por un lado, la funcionarización ha encorsetado las aspiraciones de muchos, impidiendo la innovación y la creatividad y haciéndola depender muchas veces de las simpatías que pueda suscitar en los jefes y, otras veces, para mantener el status quo y que las bibliotecas sigan siendo servicios que no dan ruido (siempre van bien), se prefiere posicionar estrategicamente a jefes que tengan controlado el patio.
¿Qué pensais sobre esto? ¿Conocéis algún caso que guarde parecido con el de Sonja?
Comentarios
Me ha gustado mucho esta entrada.
Nos vemos muy pronto en Cádiz
- De una parte en algunas administraciones, entre ellas Universidades, se está revisando la Normativa de Provisión de Puestos de Trabajo tanto por Concurso como por Libre Designación. Esperemos que a raíz de esta revisión se tengan realmente en cuenta los criterios que marca el Estatuto Básico del Empleado Público: “...procedimientos en los que se garanticen los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad, así como los de publicidad, transparencia, imparcialidad, adecuación entre el contenido y el trabajo a desarrollar y agilidad, sin perjuicio de la objetividad…”, esto en cuanto a los que se cubran mediante concurso, ya que en cuanto a los que se cubran mediante procedimiento de Libre Designación, con convocatoria pública, contará la apreciación discrecional por el órgano competente de la idoneidad de los candidatos en relación con los requisitos exigidos para el desempeño del puesto.
- De otra parte cuando en la administración se plantea una renovación de algún puesto directivo, puestos inmediatos a éstos y otros puestos denominados mandos intermedios, parece ser ya una costumbre recurrir a procedimientos en los que no media una convocatoria pública para cubrirlos.
Haciéndose así las cosas se evidencia aún más la necesidad de realizar una reforma de la Normativa para la Provisión de Puestos de Trabajo, ya que todo se hace al revés: primero se otorga a un efectivo el privilegio de ocupar un puesto, motivos desconocidos, luego, tras un tiempo de su desempeño, el puesto se ofrece a concurso de méritos y como es lógico, llegados a ese punto, ¿quién va a tener más méritos por más que los tenga, el que pueda tenerlos porque tiene los conocimientos, preparación, capacidad, actitud, aptitud, etc., o el que ya lo está desempeñando que en el momento de la entrevista con la Comisión de Valoración puede demostrar “para ese puesto” más y mejor conocimiento que nadie, supuestamente?.
Yo quisiera lanzar una pregunta, con tu permiso ¿Por qué se mantiene en el puesto a una persona manifiestamente no apta para el mismo en la universidad siendo interin@? por ejemplo
El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ha anulado los puestos de libre designación del Instituto de Agricultura de la Junta de Andalucía (Ifaca).
El TSJA sostiene que “la provisión de tales plazas de coordinadores… habrá de realizarse mediante concurso, que sin duda es el sistema más propicio para la efectiva realización de los principios de mérito, capacidad e igualdad de condiciones”.
Esto es lo que debiera hacerse, salvo puestos de especial responsabilidad, debidamente acreditados por la Administración correspondiente.
EL PAIS: http://www.elpais.com/articulo/andalucia/TSJA/anula/nombramientos/hechos/libre/designacion/Agricultura/elpepuespand/20110411elpand_1/Tes
Besos.
es como construir un auto, una persona se encarga de los vidrios, otro de los espejos y un ultimo de las llantas. ¿que sucedería si quien fabrica las llantas se enferma?
Por cierto, más anulaciones de puestos de libre designación en la Junta de Andalucía por el Tribunal Supremo. Cuando el río suena... agua lleva...
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/04/14/andalucia/1302808217.html
Todo está compartimentado y no se optimizan las capacidades indiviudales y mucho menos se busca que estas capacidades y aptitudes reviertan en la comunidad. En mi opinión, en una biblioteca -dado que hablamos ahora de bibliotecas- tan bibliotecaria debe sentirse la persona que abre las puertas del edificio, la directora o quien firma las nóminas.
Debemos trabajar -especialmente en el sector público- en pos de unos objetivos y no en pos de mantener o mejorar nuestro estatus.